LA CONJURA

domingo, 2 de junio de 2013

LOS DEMÁS DÍAS

De: Antonio García Soler



Si alguien se merece publicar un libro de poemas es Antonio García Soler,  un poeta en mayúsculas. Yo podría decir que  Antonio posee una voz poética semejante a la de Dostoievsky, a Puskin, a Baudelaire, a los grandes ... que los iguala y les sube la apuesta, tal y como  su  padre hacía cuando jugaba al poker en la quinta avenida. Sin embargo no afirmaré tal cosa para que el lector avezado no piense que es un halago desmedido y desproporcionado. 

 Padre
 Tus amigos vivos
 me hablan a mí,
 pero se equivocan.


Antonio, es uno de los poetas más profundo que conozco. El poeta de la luz de Almería, de los legones donde madura el naranjo, de su tierraAntas que es el mar y el cielo bajo el que vive. Siempre lo escucho con admiración, y nunca lo he oído decir, yo soy, yo tengo, yo me merezco, son términos que no existen en su poesía.

  Me equivoqué
 en casi todo,
 cada día,
 y entre horas.
 Pero también
 quiere uno
 esta vida,
 como sea,
 en vida.
 Incluso otras,
 como las que tenías
a mano esta mañana
ayer mismo.
También, ahora


Siempre poeta. A todas horas. Maestro. Así es su forma de entender la vida, la del  poeta, concentrado en versos concisos y perfectas palabras. El poema tiene que ser como el diamante: perdurar. Recitar el poema eternamente.


 Queríamos
 Saber lo justo
 ahora:
 sobrevivir
 bajo el cielo

 Gracias
No volverá
ni un segundo
ni un aire
ni uno mismo.

Es lo suyo.



Conversar con Antonio es divino como diría Cavafis, desborda ingenio y le sobra generosidad. Tiene para dar y repartir, decimos por aquí. Su conversación es amena, extensa y , sin embargo, sus poemas son breves como la verdad y como la vida misma. Su fuerza y su carácter hacen de su poesía un cuadro de pinceladas conceptuales, un impresionismo  de palabra veraz, capaz de transmitir la luz,  las imágenes de la infancia, la piedra blanca, la sierra azul.

Siempre nos ha venido a ver por la tarde, en su coche, (una vez tuvo uno que parecía un ovni de las lucecitas que tenía, recuerdo que aparcó, abrió las puertas y puso todos los intermitentes, faros y luces,  aquello parecía que iba a volar), repleto de historias, de palabras, de risas y al abrigo de un vaso de vino, hemos compartido nuestras cosas, amigo, todas ellas aderezadas con queso y  mermelada de castañas, hasta altas horas de la madrugada, rendidos por el sueño.


Lado del sueño
Aún queda
para los días,
los alegres,
junto a un vaso,
al lado del sueño
y de una tierra
que nos sostenía
enteros.

Este libro merece más presentaciones; el reconocimiento del poeta de la vida que es Antonio García Soler y que ahora, por fin,  publica, y que debe seguir haciéndolo porque sus poemas son nada más y nada menos que la medida exacta de las cosas.

Título: Los demás días
Autor: Antonio García Soler
Instituto de Estudios Almerienses.
 

1 comentario :

  1. Se me ha olvidado decir que el de la izquierda es el poeta Antonio García Soler y el de la derecha con gafas mi maridito.

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