LA CONJURA

domingo, 7 de febrero de 2016

TENTACIÓN


DE JANOS SZÉKELY



“Tentación” es una gran novela húngara.

El libro se lee rápido (aunque tiene 775 páginas). Nadie que empiece a leer esta historia con hechuras de novela Dickensiana, puede dejar de hacerlo. (Y si no lo creen, inténtelo a ver si lo consiguen). Se aprende y se disfruta con ella. Con un estilo sencillo, sin requiebros, nada recargada, elegante y de gran intensidad emocional nos cuenta cómo era la vida corriente entre la gente normal en una clase baja  empobrecida. Muy actual.

Comienza de esta forma:

Mi vida empezó como una novela policiaca. Intentaron asesinarme. Por suerte eso pasó cinco meses antes de que yo naciera, de manera que no creo que la cosa me causara mayor sobresalto


Béla es un niño húngaro, pobre y bastardo. Su madre, obligada por las circunstancias, debe marchar a trabajar a Budapest, confiando al pequeño Béla a una especie de hospicio rural regentado por una vieja mezquina que le hará la vida imposible y en unas condiciones de vida infrahumanas. Era una época de inestabilidades políticas: la descomposición del imperio Austro-Hungaro y la llegada al poder del fascista Miklós Horty.

Pero Béla consigue ir al colegio gracias a su insistencia y tenacidad.  Un excepcional maestro, un auténtico magiar, tan bruto como delicado, lo iniciará en la lectura, en la poesía y en el pensamiento. Una joyita en mitad de aquella inhóspita región.

El protagonista marcha  a Budapest.  Allí conocerá a sus padres 
(aunque bastardo conoció al padre,  que resultó ser un gran personaje; un hombre entrañable, divertido,  fuerte…). Entrará a trabajar de botones en un gran hotel. Alternará la riqueza y lujo del hotel con la extrema pobreza del piso y edificio donde malvive junto con otras familias sin apenas recursos. Pasará hambre, conocerá el amor, el sexo, el socialismo, el fascismo…

 Un reflejo de la proverbial tristeza húngara, un mundo desazonado por el destino al que vamos encaminados sin posibilidad de salvación…





“En un mundo como el nuestro solo quedan dos alternativas: hacerse revolucionario o sinvergüenza”

Esta reflexión, me dice mi maridito, debió ser escrita en el año 1990 también por Antonio Muñoz Molina y Mario Vargas Llosa – el marido de Isabel-,,,,,,,J (Yo le digo que no, que es un exagerado, que son dos grandes escritores y que no se meta con ellos y él se ríe dándome la razón)

Y no me digan, señores de la PAH, si esta escena descrita en la novela no es actual en España:

“Al cabo de un minuto todo el mundo sabía ya a quién se disponía a desalojar el portero: se detuvo ante la puerta de Mári, abrió la puerta con su llave, hizo una seña a los matones y entraron los tres. El portero abrió las contraventanas que Mári no se había atrevido a abrir por su culpa y los alemanes tiraron por la ventana  el “mobiliario” de la casa que—para presentar un inventario exhaustivo—consistía en dos maletas desgastadas, una burda manta de color marrón y una caja de madera tosca que hacía las veces de mesa. Y nada más. Eso era todo lo que había quedado de aquel cajista tan laborioso que no bebía ni jugaba a las cartas, que trabajó de sol a sol mientras le dejaron y que soñaba con un hijo y con un mundo más humano”


Janos Székely,  el autor, nació en Hungría, emigró a Berlín y posteriormente a EEUU. Fue, además guionista del genial Lubitsch. "Tentación" es una novela autobiográfica.  ¡Ahh! Y nuestro autor es  uno de los escritores favoritos de la también húngara Agnes Heller.